Miguel y Maria o Maria y Miguel.
Ellos custodiando nuestras vidas, en un cuadrilátero lleno de agua, mientras tanto como inertes vamos de lado a lado, solo pensando en hacer una más, olvidando nuestros problemas y evadiéndonos de nuestra vida real.
Que gran momento, mientras espero que mi cuerpo agotado y mi aliento asfixiado se sobreponga.
Que gran momento, mientras espero que mi cuerpo agotado y mi aliento asfixiado se sobreponga.
Me vuelvo a sumergir, con una visión totalmente azulada, con rayos de luz rompiendo y entrando como si fuera una espada, traspasando todo lo que encuentra a su paso, mientras sigo esperando su fin, llegando toco sus azulejos y lleno de satisfacción me repito, UNA MÁS.